Estudia la UAT al parásito que causa babesiosis en perros y su posible contagio a humanos
Martes 30 de Julio del 2024
Expertos de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) trabajan en la
identificación de una especie del parásito microscópico del género Babesia, que
causa en los perros enfermedades con potencial para transmitirse al ser humano.
Dicho estudio se origina de una tesis del Mtro. Eduardo Manolo Medrano
Zapata, estudiante del Doctorado en Ciencias en Sanidad y Producción Animal de
la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ UAT).
En su propuesta trabaja en la caracterización molecular de Babesia en perros
y sus hallazgos hematológicos, delimitando dicho estudio en la zona centro de
Tamaulipas.
En entrevista, explicó que Babesia canis (por su nombre científico) es un
parásito microscópico que, presente en la saliva de las garrapatas, puede llegar a
transmitir una enfermedad grave en los perros llamada babesiosis, causándoles
cuadros clínicos que van desde anemia, letargo, mucosas pálidas, problemas
hepáticos e incluso la muerte.
Eduardo Medrano Zapata subrayó que la importancia de su estudio radica en que
esa enfermedad puede transmitirse al ser humano.
Acotó que en Tamaulipas y el noreste de México no hay reportes de alguna
especie de Babesia caracterizada; es decir, no se tiene conocimiento de qué
especies de este género hay en la región.
En cambio, advirtió que en Texas se han identificado cuatro o cinco especies
diferentes de Babesia en perros, y dada la vecindad con nuestro estado, es
imprescindible identificar cuáles están en Tamaulipas.
El investigador de la UAT refirió que estas enfermedades son transmitidas por
garrapatas duras, que pueden transmitir virus, bacterias, protozoarios y parásitos,
por lo que representan grandes pérdidas en la salud animal y tienen implicación en
la salud humana.
Precisó que dentro de los vectores está el género Babesia, un parásito del
que se conocen más de cien especies que pueden afectar la producción de
ganado bovino, de pequeños rumiantes, así como a los equinos, aves de corral y a
la fauna silvestre.
Su tema doctoral —puntualizó— se enfoca en la babesiosis canina, que
básicamente afecta a cualquier tipo de canino, teniendo como principal ruta de
transmisión la garrapata.
Señaló que el parásito se detecta a través de microscopía, de pruebas
inmunológicas y de caracterización molecular, señalando que los avances
moleculares ayudan a identificar las especies de Babesia.
Otro de los propósitos de su investigación es la identificación del parásito en la
sangre del animal, que en más del noventa por ciento de los casos causa cuadros
de anemia hemolítica. Para ello —agregó— se analizan muestras mediante
procesos rápidos y precisos para el diagnóstico de enfermedades infecciosas y
cambios genéticos.
Detalló que a la fecha han encontrado treinta y ocho muestras positivas; de las
cuales el 55% proceden de caninos machos y el 45% de hembras. Y han
detectado la posibilidad de anemias severas en un 29% de las muestras.
Puntualizó que todavía falta hacer la caracterización de las muestras para
saber qué tipos de Babesia están presentes en esta región y, con los resultados,
continuar el estudio enfocado en la salud humana.